Saturday, July 24, 2021

POEMAS CUBANOS

POEMAS CUBANOS

cuba
desobediencia
donde duele
como Saturno
en la isla de siempre jamas
a sangre y fuego
numismatica
afuera


CUBA


La respuesta va a ser
que esta peor.
Cuando preguntes
sobre la isla
donde nacieron
tus padres,
donde murieron
tus abuelos
y donde no
van a morir
ni tu, ni tu dolor,
y mucho menos
tus hijos,
la respuesta será
que está peor.
Asi.
Sin paliativos.
Está peor,
rotundo y simple.
Lo dicen todos
los que salen.
Lo disimulan todos
los que ahi siguen.
La misma respuesta
año tras año
desde el dia que te fuiste.
Alguien mas que conoces
se habrá muerto,
algun otro balcon se habrá caido,
alguien mas que no recuerdas
habrá logrado marcharse
y ahora mismo
en algún sitio
del ancho
y ajeno mundo,
pensará en Cuba,
esa herida que no cierra
y que llevamos en el pecho.
@


DESOBEDIENCIA




Lo que el "pueblo cubano"
ha demostrado
precisamente
es que no existe tal cosa
como un "pueblo cubano"
del que puedes hablar en singular
como ese apéndice obediente
del poder:
muñecos de cuerda
programados para aplaudir,
gritar consignas contra quien se les ordene
y regresar, obedientes, al cajón de los juguetes.

Al menos eso
ya se terminó.
Tendrás que usar el plural
te guste 
o no.

Parte de esos muñecos
ya no aplauden, tiran piedras.
Parte de esos muñecos
gritan consignas 
contra quien les parece.
Parte de esos muñecos
reclaman su identidad
como personas
que pueden estar
o no
de acuerdo,
que pueden 
llegar a ser
desobedientes.

Otra parte, por supuesto,
habrá de seguir igual
como en todos los gobiernos,
como en todos los paises,
como en todos los pueblos.
DONDE DUELE

Pienso
en personas
como mi madre
que ofrecieron
olvidandose de ellos mismos
lo mejor de sus vidas
(hasta perderlas)
a ese proceso 
que muchos denominan
revolución cubana.
No me refiero
(que conste) 
a los tantos 
vividores
y aprovechados,
los sinverguenzas de toda la vida
esos que hoy tienen
lo que tenían que tener.
Hablo 
muy por el contrario
de ese 
creyente honesto
ese infeliz 
que terminó 
por ser
la victima principal
de una falsa deidad
y su mesías
ese 
del que hoy
descansamos
mientras sueña
lo que le queda de muerte
bajo una piedra

Ustedes,
seres queridos,
murieron a tiempo.
No llegaron a ver
que esa patria 
a la que tanto amaron
terminaría por convertirse
en una finca
con traspaso de propiedad
incluido.

COMO SATURNO

No sólo
terminó 
como Saturno
por devorar
a sus hijos
la señora 
Revolución.
La pobre anciana 
antropófaga
tenía tanta 
pero tanta
voracidad
que ni siquiera 
perdonó
a sus mismísimos
nietos.

EN LA ISLA DE SIEMPRE JAMAS

"A mi inolvidable suegra platonica, Lourdes Pastor, que en paz descanse."

Vivo en la isla
de Siempre Jamás.
Creí que me habia ido
pero es mentira,
vuelvo en mis noches
sin tener que actualizar
el pasaporte.

Vuelvo
a mi pais 
lleno de ausencias,
vuelvo
a mis ausencias
tan llenas de pais.

Despierto
y otra vez la realidad
me juega 
una mala pasada.
Como una broma grotesca,
como orinarte en la cama,
como caerte de bruces
o despingarte 
loma abajo
en una bicicleta.
Asi de simple.

Habito 
en un confín boreal
del mapamundi
en el que nunca 
pensé morir.
Casi 
es seguro
que asi sea
mas tarde 
o mas temprano
si es que existe
la entropía.

Vivo, 
si asi puede decirse,
con el corazón 
integra
dolida
genuinamente 
extirpado,
con las venas 
ancladas a ese otro mapa,
el que traza 
la memoria
afectiva.

No fantaseo con volver,
nunca me he ido.
En realidad nunca me fui
de mi terco pais,
de los muertos que amo
nunca he partido.

Fue tan solo
mi cuerpo.

Vivo 
en la isla de Siempre Jamás.
@
 

A SANGRE Y FUEGO

Aún, 
tambaleándoseme el credo 
comunista de mi infancia 
y temprana adolescencia, 
pregunté 
a mi padre si todo 
aquello que estábamos viviendo
(el colapso 
del imperio soviético) 
no era el fin 
"de los sueños".

(Si, 
reconozco lo estúpido
de semejante frase,
todavía mi lengua 
no se había emancipado
de ese pajizo,
melodramático
vocabulario implantado
en mi cabeza a sangre y fuego).
Y él 
me respondió con una simple,
demoledora pregunta: 

"por qué 
hay que seguir soñando?"
@
 



En el billete de un peso
siguen entrando a la Habana
los barbudos.

Lugar
con el que aún,
de vez en cuando,
sueño
no era aún la ciudad
de paredes exhaustas,
de pigmentos desleidos,
de columnas ausentes,
y letreros orwellianos.
No era aún la postal
de esa extraña posguerra,
de balcones inminentes,
de derrumbes anunciados,
no era aún los escombros
ni la grieta en el sueño
pero el mar,
nuestro mar era el mismo.

Mucho antes de existir
ese gris regodeo,
esa mueca esteticista
en lo precario
ya la Habana era su ejemplo
mas perfecto,
mucho antes de que nuestra
civilización occidental
accidental
nos camuflase
su creatividad perdida
con nostalgia
o eso que llaman en inglés
distressed style
fuese un grito en la moda,
ya la urbe era la sombra
de un algo
que alguna,
no muy lejana vez,
habia sido.

Bastantes
de los que hoy
son llamados gusanos
reclamaban paredón
para los otros.
Hay
quien dirá
que fue una fiesta luminosa,
y habrá quien recuerde
una orgía algo macabra.
Los hijos de los unos
y los hijos de los otros
no habiamos nacido.

Y si,
con toda seguridad
de haber estado vivo
yo habria sido otro rostro,
uno mas, quizá uno menos
grano de masa sin nombre
desfilando en el billete
hacia la patria,
hacia la muerte.
No era aún la nostalgia
de los carros del 50
pero el mar,
nuestro mar era el mismo.

AFUERA


Afuera.
Asi llaman
mis paisanos
al mundo
que se extiende
mas alla del malecon.

Por el ojo
de una
cerradura
recrean
con fragmentos
de su propia
imaginacion
y las medias
verdades
y las medias
mentiras
de los otros
su imagen
del mundo.

Ha pasado
tanto tiempo...
Mis ojos
se cruzan
con otros ojos que buscan.
Tienen
esa insolencia afable
de la gente de alla.
Escucho
y la voz confirma
mis sospechas.
No habia
tantos cubanos
cuando vine
hará ya
veinte inviernos
-les comento.
Las balsas
no llegaban
tan lejos.
-bromeo.
Te gusta?
-me preguntan.
Uno se adapta
-miento.
No quiero sabotearles
el coraje
y ademas
no son intelectuales.
Se merecen una vida
tranquila y sin preguntas.
Llevan
poco tiempo.
Confian
en poder
sacar
a la familia.
Ojala
que lo logren.
De corazon
les deseo buena suerte.

Yo tambien
dejé mi casa
para siempre
con la timida ilusion
de que ese siempre
no me fuera tajante
cuando un pajaro
gris
de metal
cumplió mi sueño
de llevarme
a conocer
como es
el mundo
afuera.

Hay
quien dirá
que Cuba es un paraiso.
(Un paraiso en el
que, por supuesto,
no querrán vivir).
Hay
quien dirá
que Cuba es un infierno
(comfortable referencia
de fracaso
para unos,
indirecto
y cínico
beneficio
para otros).
Hueco negro
hueco blanco
piedra
y camino
para mi.
La gente solo busca
confirmacion
de lo que piensa
o cree saber.
Yo digo
que es todo eso
y mas.
Yo digo
es simplemente
mi pais
y la pregunta
mas que probable
de mis hijos
y digo
que la verdad
es mucho
mas
pero muchisimo
mas
gris
que el fuselaje
de ese avion
en el que vine
a este lugar
llamado afuera
y si buscaba libertad
cuando me fui
la unica
que he podido
conquistar
es la de no
verme forzado a decir
lo que los otros
puedan querer
o necesitar
que diga.
Tuve
el raro privilegio
el privilegio macabro
de nacer y vivir
en una distopia analogica
y de asistir
contra mi voluntad
al nacimiento de otra
digital y globalista.
Podria
escribir un libro
al respecto
pero nadie
(ni siquiera yo mismo)
querrá leerlo.
@